Navegar por aquel mundo, exigía un ser singular.
Rodeado por las x y los "y's" requería un savoir-faire.
Ella poseaba su encanto...
con sus hilos bonitos y resistentes...
y sus brillantes tijeras afiladas.
-oh, cómo se deslizó por debajo de las fachadas-
Tenía un don de adivinar, las necesidades de cada alma
y confecionar algo único para cada individuo y su vida.
Los tonos es de lo que más lograba acertar.
Hacer un salto desde el negro hacía un granate opulento,
o un mar de indigo a un verde muy oscuro,
Rojo cereza a una turquesa cobriza...
trazaba cada estrella, meteorita, y materia oscura
caminos escondidos
lugares desconocidos.
Coronas por las animas y trajes de mil colores,transformaban la luz del Sol i la brilla de la luna
Revelando cada persona
y todos sus posibilidades
-triunfos y errores-
lo feo y el bello
el barro i el agua
fluyendo,
Una capa de flores,
petardos y amanaceres.
Una liberación absoluta, abrazando sus verdades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario